Armas de iluminación masiva

 

Meditación colectiva en el río, antes del Covid. Meditábamos juntos en la luz dorada, que se refleja en la imagen. 

Dicen que cuando el uno por ciento de los átomos de un recipiente de helio se alinean y alcanzan una coherencia, disparan la transición del resto hacia un nuevo estado de la materia, llamado “superfluidez”. Pero justo antes de la transición todo se vuelve caótico en él.

Creo firmemente en las meditaciones como “armas” o más bien herramientas de iluminación masiva. Dicen que, igualmente, un uno por ciento de meditadores en la humanidad (unos 77 millones) dispararían una nueva fase, una era de paz.

Tenemos tecnología de sobra para sanar el planeta, para optimizar nuestros recursos, para desarrollar un sistema económico basado en compartir y no en competir.

Sólo nos falta activar una consciencia que esté a la altura. 

Quizá nos vamos acercando al punto de transición, aunque esto dispare la confusión y el miedo. El cambio nunca es fácil, aunque es inevitable.

Pero todo es alinearse.

Imagina.

La fórmula del gozo

 

El Yoga enseña que el gozo es nuestra naturaleza real. Nuestra mente, sin embargo, nos induce a creer que el gozo sólo aparece adquiriendo “algo”, experiencias o cosas.

En la sesión de Yoga nos olvidamos de las cosas. Aquietamos la mente mediante diversas herramientas yóguicas, y entonces encontramos ahí dentro el gozo sin objeto. El gozo de Ser. Una llama pequeñita dentro de nosotros, “en lugar donde nadie parecía”, que puede expandirse si en vez de ignorarla la reconocemos y la apoyamos.

La práctica enseña también que el gozo y el amor van unidos – la expansión de uno activa la expansión del otro. Y viceversa. Y que el corazón se relaja cuando se expande, está muy contraído y aprisionado en la cárcel limitada del “yo”, y todos sufrimos por ello. 

No parece que la psicología occidental se haya dado cuenta de esto. Actualmente se recetan y venden muchos fármacos para aliviar las manifestaciones de este sufrimiento, en vez de dar tratamientos para expandir el amor y la consciencia y salir de la prisión claustrofóbica del “yo”. 

Free your Self. Be Yoga my friend.

El "yo" es la ola, el Ser el océano

 

Nuestro “yo” desaparecerá un día, junto con nuestra personalidad, nuestro cuerpo y nuestra mente.

Por eso el Yoga no va de engrandecer nuestro ego. Tampoco de machacarlo. El Yoga intenta ir más allá del “yo” para fundirnos con lo permanente tras él. A esto algunos lo llaman realización del Ser. El tiempo de nuestra vida, afirma, es para encontrar y realizar al Ser que en realidad somos.

El ego se enreda con las experiencias físicas, emocionales y mentales. Y éstas son duales: placer y dolor van siempre juntos. Y son impermanentes, todo cambia constantemente. Encontrar felicidad duradera en estas experiencias es como intentar retener agua con las manos. Lo intentamos una y otra vez.

Y así va pasando el tiempo.

Esto no es bueno ni malo. Es lo que hay. Tenemos la vida para experimentar todo esto.

El Yoga apunta más alto, a una felicidad inagotable. Y dice que esta felicidad es la naturaleza real de nuestro Ser. El yogui “vende todo para adquirir esa perla de gran valor”.

Deja atrás la ola de superficie del “yo” para sumergirse en el océano del Ser.

Cómo volverte invisible

 

En nuestras clases de Yoga del río (en Valencia, España) no trabajamos los músculos, ni la ejecución de una pose. Trabajamos la energía. No se ve, pero se puede sentir. Nuestro cuerpo físico está sostenido por canales de energía, “nadis” en el Yoga.

Con ejercicios, respiración y posturas de Kriya despejamos los canales y la energía se activa y fluye, pero de forma consciente: movemos, respiramos, sentimos. Cuando circula nos llenamos de vitalidad. 

Y la energía se encarga entonces de que nuestro cuerpo, mente y emociones estén y funcionen bien. 

Pero luego sucede lo mejor. Llega un momento en el que nos volvemos transparentes. Entramos en el Flujo. El Flujo de la Energía que también sostiene a los árboles, la hierba, las nubes, las aves a nuestro alrededor. La brisa nos atraviesa libremente y formamos parte de ese todo. Existir es un acto completo de gozo. 

Yoga no es ejercicios físicos para el ego, es recordar nuestra naturaleza esencial.

Seguimos en las clases del río, aprovechando el buen tiempo. 

No importa tu edad, forma física ni tu falta de experiencia – no buscamos “expertos”, buscamos volvernos transparentes.

Más info en el 649 14 50 57. En Valencia.

De la separación a la unidad

 

El miedo es el asesino de la mente, el asesino de los espíritus, es el asesino del corazón. Es lo opuesto al amor. Y el amor es, en última instancia, esa fuerza magnética en el cosmos que une todas las cosas en una. 

La separación es lo opuesto al amor y, por lo tanto, el miedo conduce a la separación. 

El amor conduce a la unidad, a todo.

- S. Greer

Cuando lo escondido sale a la luz

 

Al despertar, la energía divina de kundalini va sacando a la luz todos nuestros diferentes aspectos internos, nuestras tendencias, y las va enhebrando como el hilo del rosario que enlaza todas sus cuentas. Todo lo que estaba escondido sale a la luz. Todas nuestras tendencias siempre están ahí, desde nuestras más antiguas encarnaciones. Algunas están presentes en nuestra consciencia, condicionando directamente nuestra conducta, otras permanecen dormidas en el fondo de nuestra psique, esperando el momento oportuno para germinar.

Los hábitos de otras vidas quieren salir a la luz, empujados por kundalini, que infunde mucha energía en el sistema del yogui, para hacerle avanzar hacia el samadhi (unión), y entonces todas las resistencias a este avance salen también a la luz. Al hacer conscientes estas tendencias latentes puedes dejar de sostenerlas inconscientemente, ya que siguen ahí en la psique gracias a la aprobación que les diste en otras vidas.

- Avanzando en el Yoga: el sendero de Kundalini, los chakras y los Siddhas

https://www.amazon.com/dp/B087CQM7ZN/ref=cm_sw_em_r_mt_dp_F2PX0N5V7ZYVK2FTSMN2

La fuerza para actuar

 

El amor es la energía y la fuerza para actuar una vez ya no estás en el ego

- Kriya Babaji

Ramalinga Swami y el cuerpo de luz

 

“En la puerta de la habitación en Vadalur, Tamil Nadu, India, donde Ramalinga Swami (Vallalar) disolvió su cuerpo físico en la Luz de Gracia (Luz de Dios). Ramalinga Swami fue uno de los santos más grandes que jamás haya producido la India. A la edad de 50 años, les dijo a sus discípulos que se iba porque no estaban practicando lo que les estaba enseñando. Entró en su habitación, se sentó en el suelo y les dijo que cerraran la puerta con llave y no la abrieran. Después de muchas semanas, pensaron que debía haber muerto porque no había entrado agua ni comida. Finalmente, se sorprendieron al ver un destello de luz púrpura a través de la rendija en la parte inferior de la puerta. Abrieron la puerta y vieron que no estaba. No había otra forma de salir de la habitación. Les había dicho durante años que estaba practicando una sadhana (práctica espiritual) que estaba refinando su cuerpo físico y que culminaría en su cuerpo fusionándose con la Luz de Gracia. Ramalinga Swami dijo que la clave para el desarrollo espiritual es practicar la bondad amorosa hacia todos los seres vivos en cada momento de la vida. Eso significa el 100% del tiempo. Dijo que Dios es amor y compasión y que cuando practicas la bondad amorosa, las energías de Dios fluyen a través de ti y divinizan las células de tu cuerpo.”

Traducido de:

https://www.facebook.com/photo/?fbid=10211739938004581&set=a.1080359059842

Puedes leer un poema fundamental de Ramalinga Swami en mi web: https://www.kriyayogadebabaji.net/t-ramalinga.htm