domingo, 30 de octubre de 2016

Trascender el pequeño "yo" de deseos


Algunos comentaristas cristianos han malinterpretado la filosofía india al pensar que trata de aniquilar la individualidad y renunciar a la vida. La disciplina yóguica no trata de anular a la persona, sino de anular al ego, nuestro pequeño “yo”, enfrascado en sí mismo y en obtener sus pequeños y transitorios goces. Este mismo proceso de trascender el ego es el que realizan los místicos cristianos (y los místicos de diferentes tradiciones religiosas) y al llevarlo a cabo atraviesan la llamada “noche oscura del alma”. En ella se van abandonando los diferentes impulsos que no están en sintonía con nuestro propósito más elevado, se van soltando las partes de nuestra personalidad, nuestros gustos y apetencias, a veces muy familiares y queridos, que no responden a la voz de nuestro ser superior:


"Si tu mano es para ti ocasión de pecado, córtatela. Es mejor para ti entrar en la Vida manco, que ir a la gehenna con las dos manos, al fuego inextinguible", (Marcos 9.43).

El fuego inextinguible es el fuego del deseo, de la búsqueda del gozo en experiencias de los sentidos, que nunca acabarán de saciar esa necesidad interna de plenitud. El "pecado" es el error de buscar ese gozo fuera de nosotros, olvidando el Reino interno de Dios. 

La entrega al ser superior
Cristianismo y Yoga

lunes, 17 de octubre de 2016

Samata, ecuanimidad en el entorno ordinario


La mejor forma de prepararse para la vida espiritual cuando uno tiene que vivir en ocupaciones y entornos ordinarios es cultivar una completa ecuanimidad y desapego, y el samata (equilibrio) del Bhagavad Gita, con la fe de que el Divino están ahí y de que la Voluntad divina trabaja en todas las cosas, incluso en el presente, bajo las condiciones de un mundo en ignorancia. Más allá de esto están la Luz y el Gozo hacia los que trabaja la vida, pero la mejor forma para que lleguen y se establezcan en el ser individual y en la naturaleza es crecer en esta ecuanimidad espiritual. Esto resolvería también tus dificultades con las cosas desagradables y molestas. Todo lo desagradable debe ser afrontado con este espíritu de samata.

Sri Aurobindo