El sadhak entregado también sabe que las desgracias y el sufrimiento no son en vano, sino que son sancionados por lo Divino por cumplir un propósito espiritual necesario cuyo significado se revelará a tiempo. El sadhak rendido sabe y siente que el Divino no está lejos o ausente durante su sufrimiento, sino que se encuentra en el corazón de su mayor dificultad, guiando desde allí el curso de las circunstancias para llevar al sadhak a la unión con el Divino. El sadhak entregado también sabe que si se enfrenta con coraje, paciencia y la actitud correcta, en un espíritu de rendición, cada dificultad trae un gran beneficio espiritual. Finalmente, el sadhak entregado sabe que hay un propósito subyacente que conduce a algún futuro bien espiritual.
Sri Aurobindo.
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