Nuestra vida es nuestra práctica
La Consciencia se puso a imaginar y a ensoñar, más y más, a ver hasta dónde podía llegar. Y se perdió a sí misma en mundos, conflictos y sufrimientos sin fin.
Y en medio de todos ellos encontró algo. Descubrió la compasión.
Y la Consciencia sonrió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario