martes, 9 de octubre de 2012

Reconstruir el cielo


Un cielo de creativas verdades en lo alto,
un cosmos de armoniosos sueños en medio,
un caos de formas que se disuelven por debajo,
se sumerge perdido en nuestra base inconsciente.


Este caído mundo se convirtió en semillero de almas
habitado por la escondida divinidad.

Este cieno debe albergar la orquídea y la rosa,
de su renuente ciega substancia debe emerger
una belleza que pertenece a esferas más felices.

Las partes perecederas de una divinidad inmortal
debe reconstruir a partir de fragmentos perdidos,
volver a redactar a partir de un documento completo en alguna otra parte
su cuestionable título a su Nombre divino.

Un residuo su única herencia,
todo lo contiene en su polvo sin forma.


sri Aurobindo, Savitri